TEATRO PARA MINUTOS

                                                  

                                                Cartel diseñado por Raúl López

 Se acaba el curso escolar y, mis alumnos de 2º Artes Escénicas no podían irse sin dejar su impronta en nuestro pobre teatrito.

Así que nos pusimos a trabajar y preparamos varias obritas cortas, en total cinco, de diferentes autores.

La primera pertenecía a Esteve Soler, a su Trilogía, conformada por Contra el progreso, Contra el amor, Contra la democracia.

En esta extraordinaria obra Soler presenta su visión sobre  el mundo contemporáneo en pequeñas píldoras góticas, rellenas de ácido sulfúrico, nacidas a partir de la observación de que el capitalismo consumista deforma la palabra y la realidad, hasta convertirla en algo dolorosamente absurdo.

Los actores eran Lucía Larred, Ángeles Carretero y Álvaro Jiménez.

La segunda obra, también fue extraída de la misma trilogía de Esteve Soler. Su argumento giraba alrededor de la historia de un actor porno. Su protagonista absoluto fue Álvaro Jiménez.

La tercera pertenecía a Sergio Belbel, a su obra Morir. Su terrible argumento gira en torno al mundo de las drogas. Se trata de una pieza muy dura, interpretada con toda su crudeza por Ainoa Simón y Justo Charco.

La cuarta, de Juan Mayorga, extraída de Teatro para Minutos, de ahí el nombre de nuestro espectáculo, trataba el mundo de los simpapeles y estaba interpretada por Mario Morell y Marcos Escámez

La quinta y última, no era una obra, sino un fragmento de Bodas de Sangre. El momento en que la novia vuelve a casa de su suegra a pedir que la mate. Esta escena fue interpretada por Irene Víllora, de una manera tan sentida que te ponía los pelos de punta.

Una vez acabada la representación de las cinco obritas, salimos todos a saludar al escenario. Fue un momento súper emocionante. 

Mis chicos se van, nunca los olvidaré.

DÍA INTERNACIONAL DEL LIBRO

                                    

Cartel elaborado por el profesor MARCOS PASTOR

Como en los tiempos anteriores al cóvid, por fin este año se ha podido celebrar como dios manda este día tan importante.

En la Escuela tuvo lugar la entrega de premios de los diferentes concursos convocados este curso con ocasión de este día tan especial:  Concurso Literario, Poesía Visual, Ilustración y Música.

A continuación, Marcos Escámez, con su extraordinaria y radiofónica voz, procedió a leernos el Manifiesto del Día del Libro de este año, 2022.

Una vez leído, nuestros alumnos de Escénicas de 2ºA y 2ºB procedieron a interpretar varias escenas del teatro Barroco, extraídas de obras de dos grandes,  Lope de Vega y  Shakespeare. Todo ello en nuestro improvisado escenario del hall de la EA y presentados por un invitado de excepción, nada más y nada menos que Don Miguel de Cervantes Saavedra. Mario Morell fue el encargado de meterse en la piel de tan extraordinario genio.  

A continuación, Mar Cuenca clavó el monólogo de Laurencia ante los hombres de Fuenteovejuna. Nos dejó a todos anonadados con su talento.

Por otra parte, Mateo García y Justo Charco, interpretaron a Otelo y Yago. Tampoco defraudaron con su talento dramático. Y hay que destacar que Justo no solo hacía de actor, sino que ejerce siempre de técnico de sonido en cada uno de los eventos que programamos. Nunca se lo agradeceré bastante

La siguiente escena, extraída de El perro del hortelano, estuvo protagonizada por José Luis José, en el papel de Teodoro y Lucía Monteagudo, en el papel de Diana. Nos dejaron admirados por su dominio del verso barroco y su naturalidad interpretativa. 

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Por último, Álvaro Vicente, actor en ciernes, nos hizo una interpretación desgarradora de Macbeth.

                               

Una vez acabado el acto en la Escuela, nos trasladamos todos, con los cachivaches a cuestas, hasta la Biblioteca del Sol, donde se estaban realizando variadas actividades con niños de la ESO y allí volvieron a representar sus papeles, pero esta vez al aire libre. Teatro de calle, vamos.

Este es el cartel que para la ocasión elaboró nuestro director Don Hugo Candeias.

Y así acabó una jornada llena de emociones y de amor al teatro y la literatura. Una experiencia inolvidable.